Conocida como La Ciudad Roja, Marrakech es el principal destino turístico de Marruecos Que ver en Marrakech
La ciudad encanta a viajeros de todo el mundo, perdiéndose por los callejones, descubriendo rincones mágicos de la ciudad medieval.
Son experiencias que te dejarán huella.
Esta guía contiene la información principal para que disfrutes de tu viaje a Marrakech. Descubre qué ver y que hacer en la ciudad . Que ver en Marrakech
Que ver en Marrakech: Para ti que siempre has deseado pasar tus vacaciones rodeado de palacios, mercados, mezquitas y jardines, Marrakech es tu mejor destino. La ciudad de Marrakech tiene más de un millón quinientos habitantes, es considerada junto a Fez, Mequinez y Rabat como las cuatro ciudades imperiales más importantes de Marruecos. Su clima es de tipo semiárido, caracterizado por presentar inviernos suaves y húmedos mientras que los veranos son cálidos y secos.
Que ver en Marrakech
En el año 1062 fue fundada por Youssef Ibn Tachfin. Este, fue considerado como el primer emir de la monarquía Bereber de los almorávides. Luego, la ciudad se destacó como una zona comercial, por esta región transitaban rutas de caravanas hacia África a través del Sahara.
Pronto el objetivo se centró en la necesidad de construir el imperio más grande y poderoso en el lugar, aspecto que llevaría a demostrar, desde su capacidad organizacional hasta su control económico, político e indudablemente religioso. Esta premisa determinó el crecimiento de la ciudad, un lugar con atractivos únicos en África.
En Marrakech se encuentra la Avenue Mouassine, considerada la calle con más glamour de la Medina.
Podrás ver innumerables tiendas aquí y perderte entre las paredes de arcilla roja o ladrillo. ¡Será toda una aventura!
La Plaza Jamaa el Fna, considerada el principal lugar del turismo local. Su forma es irregular. La plaza está pavimentada. Todas las rutas de la Medina conducen a esta plaza.
Cabe mencionar que la Avenida Mohammed V es una importante avenida arbolada en Guéliz, este lugar considerado como el principal barrio de Marrakech.
Está rodeado de edificios de arquitectura moderna, comercios, bancos, restaurantes y cafés con terrazas.
Su punto más destacado es el cruce con la calle La Liberté. En este sitio se encuentra el reconocido Mercado Central. En general, muchos turistas y lugareños van allí a comprar comida e incluso flores.
Si hay algo parecido a las ciudades occidentales y que sin duda es simbólico, dado que es el lugar de encuentro, el intercambio cultural y la recreación son las plazas, Marrakech no es el significado, tiene la plaza de Jamaa el Fna, un espacio donde la vida se desarrolla día y noche. Si te haces la pregunta: ¿Qué ver en Marrakech? Ya sabes que la vista nocturna de la plaza djema el Fna es imprescindible.
Increíblemente, este espacio también ha sido reconocido como patrimonio oral de la humanidad; Y debe ser, teniendo en cuenta el mestizaje lingüístico y cultural que se puede encontrar en un espacio como este, donde los nativos muestran sus productos en un afán de vender, pero a la vez ofrecen una de las cosas más preciadas de un país. ; su gente, sus ideas, sus historias y sus circunstancias y gracias a ello el viaje se convierte en algo más completo; ya que de repente logramos entender quizás lo que no entendíamos de otras personas.
Por la mañana encontrará vendedores de jugos, encantadores de serpientes y otros en la plaza. Por la noche la plaza se llena de puesto de comida, donde se preparan platos típicos a la vista del público. La presentación de música en vivo es un evento muy divertido para los turistas.
Los almorávides convirtieron a Marrakech en la capital del imperio durante el siglo XI. Sin embargo, debido a los constantes enfrentamientos y deseos de expansión de diversos grupos, los almorávides fueron desplazados por los almohades, este grupo conquistó Marrakech a mediados del siglo XII, con lo cual la ciudad sufrió cambios positivos en sentido de urbanización, debido a que se construyeron dos mezquitas, una de ellas continúa de pie hoy en día como un símbolo de la unidad para la ciudad, se trata de la Mezquita de Koutoubia, la cual se caracteriza por su alto minarete, recordando con ello la Giralda en España, a ello le acompaña su color, determinado por la arenisca rosada, piedra característica de la región.
Del mismo modo, Marrakech cuenta con lugares emblemáticos para hacer turismo, como el Mellah. Su creación se sitúa en el siglo XVI. Actualmente, dicha judería conserva la sinagoga como la de Al Azama que junto con el cementerio judío atraen la atención de los viajeros. Sus calles no están llenas de manchas como el Zoco, pero hay buenos mercados con precios económicos. Del mismo modo, para llegar a Mellah hay que ubicar la Plaza des Ferblantiers, conocida como la plaza de los hojalateros, allí está la puerta de entrada al barrio.
Esta imponente muralla rodea la medina de Marrakech. Más de 15 kilómetros de majestuosidad que separan la parte más antigua de este pueblo de los barrios modernos. Es una de las visitas recomendadas. ¿Qué ver en Marrakech? Pues seguro que las Murallas deben estar en tu lista de visitas imprescindibles en la Ciudad de Marrakech. Este muro deslumbra a sus habitantes con una altura de 10 metros. Fue construida con arcilla y tiene 10 puertas de entrada, entre las que destaca la Puerta Bab Agnaou. Tiene bajorrelieves en colores verdes.
Se puede caminar sobre la muralla, lo más interesante de este recorrido es conocer sus puertas, entre las que destacan las de Bab el Robb, Bab el Debbagh, Bab el Jadid, Bab Doukkala y Bab el Khemis.
La madrasa, donde más de 800 estudiantes memorizaban el Corán, fue fundada por el sultán Abou al Hasan en el siglo XIV. Sin embargo, fue totalmente reconstruida por los saadíes, quienes dejaron una mayor muestra de arte y arquitectura en la misma.
En el centro de la madrasa se dispone un gran patio de abluciones con una alberca central. Los edificios están hechos de madera de cedro con estuco y azulejos de colores.
La sala de rezos posee una de las decoraciones más exuberantes del conjunto, usando piñas y palmeras para la decoración del mihrab.
En toda la madrasa hay numerosas inscripciones en estuco y azulejos, de las cuales la más común es el basmala.
Marrakech es una ciudad que se disfruta en la calle, pero si tiene curiosidad y te gusta los museus pude visitar a este escontrarás algunas piezas antiguas, y detalle para la lâmpara. https://es.wikipedia.org/wiki/Museo_de_Marrakech
Desde la Pandemia el museo permanece cerrado, no se sabe al cierto si volverá a abrir.
Jardines de la Menara. Seguramente habrás visto fotos de este lugar una casa con el fondo las montañas del atlas. pues alli estan los Jardines de Agdal creado en en siglo XII, durante el reinado del Califa Almóada Abd al-Mu’min.
Uma visita imprescindible. Puedes ir ent áxi o incluso dando un paseo en un coche de caballos
En Marruecos hay un tipo de alojamiento que se llama Riad, son pequeños hoteles con encanto ubicados en general en el casco antiguo de la ciudad, algunos ofrecen servicio de restauranción y otros solo alojamiento. Diferente de los Hoteles que son catalogados con Estrellas, los Riads infelizmente no tienen referencia, por lo tanto, antes de reservar debes buscar informaciones y comentários de los clientes y mirar las fotos en internet .
Es importante tener en cuenta que hay Riads con servicios similares a hoteles de lujo hasta hostales. Variando claramente los precios de las reservas.
Abajo indicamos algunos Riads recomendamos en Booking.com servicios de Las . en el Centro de la ciudad. Asi seria mas facil locomoverse para visitar los monumentos en algunos de ellos podrás ir a pié. Pueder coger un petit taxi, es muy facil locomoverse con el las ciudades .
Abajo te facilitamos un mapa con la región central de la ciudad, y la más concurrida a la hora de buscar un alojamiento.
Comer en Marruecos es un verdadero espectaculo.Sabores , especies , gastronomia, influencia, cocina sencilla, tardicional,
Se trata del patio interior de un riad localizado en los alrededores de Jemaa el Fna que hace las veces de café y restaurante. El edificio, del siglo XVI cuyo diseño se basa en el apogeo del Marrakech de los años 60 y 70, está lleno de plantas, árboles y pajaritos creando una atmósfera fresca, en colores verde y agua marina, diseñada por la arquitecta de interiores Anne Favier. Un espacio que traslada al visitante a un entorno exótico y relajado que se convierte en un auténtico oasis dentro del caos de la ciudad. Su cocina está a medio camino entre lo tradicional marroquí y lo europeo y se combina con cócteles hechos al momento y zumos de frutas .
Se trata del patio interior de un riad localizado en los alrededores de Jemaa el Fna que hace las veces de café y restaurante. El edificio, del siglo XVI cuyo diseño se basa en el apogeo del Marrakech de los años 60 y 70, está lleno de plantas, árboles y pajaritos creando una atmósfera fresca, en colores verde y agua marina, diseñada por la arquitecta de interiores Anne Favier. Un espacio que traslada al visitante a un entorno exótico y relajado que se convierte en un auténtico oasis dentro del caos de la ciudad. Su cocina está a medio camino entre lo tradicional marroquí y lo europeo y se combina con cócteles hechos al momento y zumos de frutas .
Se trata del patio interior de un riad localizado en los alrededores de Jemaa el Fna que hace las veces de café y restaurante. El edificio, del siglo XVI cuyo diseño se basa en el apogeo del Marrakech de los años 60 y 70, está lleno de plantas, árboles y pajaritos creando una atmósfera fresca, en colores verde y agua marina, diseñada por la arquitecta de interiores Anne Favier. Un espacio que traslada al visitante a un entorno exótico y relajado que se convierte en un auténtico oasis dentro del caos de la ciudad. Su cocina está a medio camino entre lo tradicional marroquí y lo europeo y se combina con cócteles hechos al momento y zumos de frutas .
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