Tinerhir, ubicada en el sureste de Marruecos, es una de las joyas ocultas del país. Rodeada de montañas, con un impresionante palmeral y una rica historia, esta ciudad es un destino perfecto para quienes buscan conocer la auténtica esencia marroquí.

Si dispones de solo un día en Tinerhir, aquí te contamos los lugares imprescindibles que no puedes perderte.
Cómo llegar a Tinerhir
Tinerhir se encuentra en la región de Drâa-Tafilalet, entre Ouarzazate y Errachidia. Para llegar hasta aquí, puedes optar por varias opciones:
- En coche o excursión organizada: Desde Marrakech o Fez, la mejor opción es alquilar un coche o unirte a un tour que recorra la zona.
- En autobús: Varias compañías, como CTM y Supratours, ofrecen rutas desde Marrakech y otras ciudades importantes.
- En taxi compartido: Es una opción popular entre los locales, aunque menos cómoda para los turistas.
Una buena forma de explorar la zona es hacerlo en una ruta más extensa por el sur de Marruecos, como la famosa Ruta de las Mil Kasbahs, que permite descubrir los rincones más espectaculares de la región.
Barrio judío de Tinerhir
El barrio judío de Tinerhir, conocido como el Mellah, es testigo de la antigua convivencia entre musulmanes y judíos en Marruecos. Pasear por sus calles es viajar en el tiempo, descubriendo casas de adobe con ventanas de madera tallada y antiguas sinagogas.

Aunque hoy en día la comunidad judía ha desaparecido casi por completo, aún se pueden ver restos de su legado en la arquitectura y en algunas historias que cuentan los habitantes locales.
Palmeral de Tinerhir
Uno de los paisajes más impresionantes de la zona es el Palmeral de Tinerhir, un oasis verde que contrasta con las áridas montañas del Alto Atlas. Se extiende a lo largo de varios kilómetros, con palmeras datileras, pequeños canales de riego tradicionales y aldeas de adobe.
Es un lugar perfecto para un paseo relajante, disfrutando de la tranquilidad y el sonido del agua fluyendo entre los campos de cultivo.
Kasbah de Tinerhir
Las kasbahs son construcciones típicas del sur de Marruecos, y la de Tinerhir es una de las más impresionantes. Aunque en algunos puntos está en ruinas, todavía conserva su estructura imponente y ofrece vistas espectaculares del valle.
Este tipo de arquitectura es un reflejo del pasado bereber de la región y su importancia en la historia del comercio caravanero.
Gargantas del Todra
A solo 15 kilómetros de Tinerhir se encuentran las espectaculares Gargantas del Todra, uno de los paisajes naturales más impresionantes de Marruecos. Se trata de un desfiladero con paredes de hasta 300 metros de altura, esculpido por el río Todra.

Es un destino ideal para los amantes del senderismo y la escalada, pero también para quienes simplemente quieran disfrutar de una vista inolvidable.
Oasis de Tinerhir
El Oasis de Tinerhir es una prolongación del palmeral, pero con un paisaje aún más pintoresco. A lo largo del valle, pequeños pueblos bereberes se mezclan con antiguas kasbahs y jardines frondosos. Es un lugar ideal para desconectar y experimentar la serenidad del Marruecos rural.
La Mezquita Ikelane
Otro punto de interés es la Mezquita Ikelane, una de las más importantes de la zona. Su minarete de adobe es un ejemplo perfecto de la arquitectura tradicional del sur de Marruecos.
Aunque no es accesible para no musulmanes, su exterior es digno de admirar y ofrece una visión fascinante de la vida religiosa en la región.
Conclusión
Tinerhir es mucho más que una parada en el camino hacia el desierto. Su riqueza histórica, sus paisajes naturales y su autenticidad lo convierten en un destino imprescindible en cualquier viaje por Marruecos. Si solo tienes un día para visitarlo, asegúrate de explorar su palmeral, su kasbah, el barrio judío y, por supuesto, las impresionantes Gargantas del Todra.
Si quieres descubrir Tinerhir y otros rincones espectaculares del sur de Marruecos, una opción perfecta es hacerlo dentro de un itinerario más amplio, como la Ruta de las Mil Kasbahs, que te permitirá conocer a fondo la cultura y la belleza de esta fascinante región.